Semyon Bychkov y las hermanas Labèque, este fin de semana con la Sinfónica de Castilla y León

Dos días para homenajear al piano

   Un reportaje de Agustín Achúcarro
El viernes 9 y el sábado 10 son las fechas elegidas por la Orquesta Sinfónica de Castilla y León para su concierto de esta semana de nieves y fríos del mes de febrero. El mismo sábado en el vestíbulo del Auditorio, en el que habrá instalados cincuenta pianos, se realizarán Tres talleres de piano (a las 10h, 12h y 17h) para veinte personas cada uno, con carácter gratuito. Además, antes del concierto de ese día Katia y Marielle Labèque junto a alumnos y profesores interpretarán simultáneamente la Nº5 de las Siete piezas de Mikrokosmos de Bartók y Metamorphosis Two de Glass, coreografiado por alumnos de la Escuela Superior de Danza de Castilla y León, en lo que la OSCyL ha dado en llamar “Todo piano”. Se realizará a las siguientes horas: 19h, 19:15h y 19:30h. “Esto no lo habíamos hecho nunca y pienso que va a ser un maravilloso jaleo”, afirma Katia, a lo que Marielle añade que “no habrá problema pues no tenemos vecinos a los que podamos molestar”.    

  El programa del concierto lo integran Weites Land (Música con Brahms para orquesta) de Detlev Glanert, que supone un estreno en España y que refleja la admiración del compositor por la figura de Brahms, el Concierto para dos pianos en la bemol menor, op.88a de Bruch y la Sinfonía Nº4 en fa menor, op.36 de Tchaikovski.

  En cuanto a la obra de Bruch dos hermanas la estrenaron, concretamente Rose y Ottilie Sutro, y otras dos hermanas serán las intérpretes en esta ocasión: Katia y Marielle Labèque. Sobre esta obra Julio García Merino, archivero de la OSCyL, en su página de facebook hace un sucinto y clarividente análisis. Tras contar las vicisitudes por las que ha pasado esta partitura durante la época de sus iniciales interpretaciones aclara que la versión que se escuchará de esta obra será “la revisión de Berkofsky”, que “fue publicada por Simrock, el editor de Bruch en Alemania”.

   En relación a las primeras intérpretes de la obra de Bruch, Marielle Labèque se refiere a ellas con cierta ironía y bajo un prisma muy personal. “Es un concierto con una historia muy rara, pues las encargadas de interpretarlo eran dos hermanas muy ricas que no tenían conocimientos suficientes para tocarlo bien, por lo que realizaron muchos cortes y fastidiaron la obra”. “Bruch-añade Katia- se enfadó mucho y puso una clausula por lo que solo podían tocarlo en América”. La supervivencia de la obra tomó un cariz esperanzador tras la muerte de sus intérpretes originarias. “Se repartieron las cosas de Bruch en cajas y en una de ellas estaba el concierto para dos pianos, aunque faltaban partes de muchas secciones, como los violines”, argumenta Katia. En el artículo de Julio García Merino se puede leer lo siguiente: “Sus efectos fueron subastados en enero de 1971, y el pianista Nathan Twining compró por once dólares una caja de partituras manuscritas, que incluía la partitura autógrafa del Concierto, aunque su paradero actual es desconocido”. En relación a los aspectos musicales de la partitura, en una valoración llena de detalles, el propio García Merino manifiesta que “quizá no sea una de las obras más sobresalientes de Bruch, pero no por ello deja de presentar elementos de interés que merecen tenerse en cuenta”. En cuanto a la perspectiva que tienen de esta obra las dos pianistas ellas ponderan la labor que realiza un director de las capacidades de Semyon Bychkov. Katia, entre sonrisas recuerda que el director es el marido de Marielle, y subraya la importancia que tiene el hecho de que los tres “hayan trabajado asiduamente por lo que están muy compenetrados”. “Es casi una sinfonía, por lo que para la orquesta no es nada fácil y el director tiene que hacer un trabajo muy grande, en particular en lo relativo a dinámicas”, asevera Katia con la aquiescencia de Marielle.  

   Tras Bruch la OSCyL interpretará la Sinfonía Nº4 en fa menor, op.36 de Tchaikovski. Una obra que se considera que inicia la trilogía de composiciones del destino o trágicas, de la que Semyon Bychkov puede presumir de ser uno de esos directores que la conoce al detalle.

   En los talleres, con la aportación de un ingeniero acústico de Yamaha, se informará sobre los pianos técnicamente más avanzados, que serán aportados por la citada empresa de pianos, mientras que el resto serán puestos a disposición de los músicos por el Conservatorio de Valladolid, en el mes que comienzan las celebraciones de su centenario. Se explicarán también las características del piano y su evolución, así como las propiedades técnicas de los instrumentos que combinan la técnica de pulsación clásica con la digitalización, que permite por medio de unos auriculares evitar que se escuche el sonido (sistema silencio). Válido para no molestar a los vecinos, sugiere Katia, quien asevera que “tiene uno en su casa de Roma para tocar por las noches, aunque lo que sí que se escucha mínimamente es la pulsación”.

   Aquellos que quieran participar en los talleres pueden inscribirse en: info_arroba_centroculturalmigueldelibes.com o llamando al 983 376405 el viernes 9, de 10h a 14h.