Libro: 'Por el camino de Richter' de Yuri Borísov (Edit.  Acantilado)

EL ICONO RICHTER

Por Albert Ferrer Flamarich
Por el camino de Richter. Yuri Borisov. Acantilado, Barcelona, 2015. (262 págs.). IBSN: 978-84-16011-63-6

   Las fuentes literarias pueden aportar testimonios y aclaraciones de tipos muy diferentes: unas veces pueden hablarnos de lo que hacen los músicos o de lo que se siente al participar en el acto musical pero otras veces utilizarán la música como metáfora de ideas de la más amplia variedad e importancia. Esto es tan obvio como que el crecimiento de la afición y el acceso a la música por capas cada vez más intermedias de la sociedad, la curiosidad por conocer datos sobre los músicos y las obras aumentó. Hoy día este tipo de literatura de carácter no académico continúa existiendo, y también con gran vitalidad, aunque habitualmente referida a músicos de otros estilos. Es lo que se conoce como fanzines y que tiene en el sector adolescente y juvenil como el principal consumidor. No obstante en el terreno de la música clásica se reconvierte en un acto de elevada cultura bajo el ropaje de una integridad intelectual y una superioridad moral –y artística- que parecen diluir el aparato comercial y ocasionalmente sensacionalista que hay detrás. Eso sí, sin negar la vigencia y el interés documental e informativo. Un ejemplo es el libro que Acantilado posee en su excepcional y no suficientemente ponderada colección.

   Espontáneo, culto, brillante, hiperactivo, apasionado… Así muestra a Sviatoslav Richter, el director de escena teatral y operístico Yuri Borísov en un texto que salta de un tema a otro en un discurso disperso donde todo se entremezcla y cohesiona porque todo está vinculado a todo en la mente ultrasociativa y considerablemente sinestésica del pianista ruso. Y ello se debe porque en el fondo habitaba una gran concepción interpretativa que tiene en el capítulo sobre el Clavecín bien temperado de Bach uno de los pasajes más delirantes y de reflejo evidente por la caleidoscópica explosión de su personalidad. Sin duda es una delicia para mitómanos, editado con la corrección y elegancia característica a la línea austera de Acantilado. Además se incluyen excelentes notas al pie de página que circunscriben al espectador entorno de los personajes, hechos u otras relaciones vinculadas a las vivencias, ideas e inquietudes recopiladas por Borisov. Un libro que metodológicamente nos recuerda que la literatura musical no es un tipo de fuente uniforme y la variedad de enfoques responde más al sujeto que al objeto. Especialmente en la matriz de un libro que parte de lo que se catalogaría como literatura oral.