El Jurado ha valorado su talento, popularidad y cercanía personal, así como su trayectoria profesional espectacular, fruto de una vida entregada al canto en cuerpo y alma.
Codalario también ha querido llamar la atención sobre la actitud crítica y reflexiva de Pedro Lavirgen en torno a su propia trayectoria y acerca del oficio mismo del canto, con sus entresijos técnicos y dramáticos.
Pedro Lavirgen, nacido en Bujalance (Córdoba) en 1930, debutó en Zaragoza en julio de 1959 como Jorge de la zarzuela Marina. Después de trabajar con José Tamayo en la Compañía Lírica Amadeo Vives, en 1964 debuta en México a nivel internacional con Aída de Verdi. Ese mismo año interpreta el papel de Don José, en la ópera Carmen, de Bizet, en el Teatro del Liceo de Barcelona, coliseo en el que actuó durante dieciocho años consecutivos. En 1976 debuta en la Scala de Milán, de nuevo como Radames (Aida) junto a Montserrat Caballé. A éste le siguieron los debuts en la Staatsoper de Viena (donde actuó durante doce temporadas), en el Metropolitan de Nueva York, en el Colón de Buenos Aires, en la Arena de Verona y en las óperas de San Francisco, Múnich o Berlín, llegando su voz incluso a los escenarios de Tokyo.
Pedro Lavirgen triunfó como cantante en los principales escenarios españoles. Retirado de los escenarios en 1993, desde entonces desempeñó su labor docente desde la cátedra de canto en el Real Conservatorio de Madrid.
Los grandes papeles de su repertorio operístico fueron roles dramáticos y para tenor spinto, como el Radames de Aída, Calaf de Turandot, Canio de I Pagliacci o el rol titular de la ópera Otello, de Verdi.
Declarado admirador de Miguel Fleta e Hipólito Lázaro, Lavirgen vio marcada su infancia y su juventud por el transcurso de la Guerra Civil. En 1950, antes de decidirse por el canto, obtuvo el título de maestro tras completar con éxito los estudios de magisterio. Vocación, la de la enseñanza, que todavía hoy desarrolla aplicando sus conocimientos sobre la técnica vocal y el repertorio operístico.
A lo largo de su dilatada carrera ha recibido ya numerosos galardones, como el Premio Nacional de Teatro en dos ocasiones, en 1963 y en 1972. Se le concedió también la medalla de oro del Círculo de Bellas Artes de Madrid en 1967, la medalla de oro del Círculo de la Ópera de México en 1965, la medalla del Liceo en 1969, el Verdi de Oro en 1973 y el JussiBjoerling de Módena en 1977.
La presentación y entrega de la Primera Edición de los Premios Codalario de la Música tendrá lugar en la Sala Manuel de Falla del edificio de la SGAE de Madrid, el 4 de octubre a las 12:30h. El galardón, una figura en bronce creada en exclusiva para la ocasión, es una creación del pintor y escultor español Sergio Portela Campos.
El jurado de los premios, presidido por Aurelio M. Seco, director de Codalario, la Revista de Música Clásica, se completa con los críticos Raúl Chamorro Mena, Alejandro Martínez, Arian Ortega, Gonzalo Laohz y Rubén Martínez.
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