Concluido ya el ciclo que ha ocupado los miércoles del mes de enero en la Fundación Juan March [El origen de la «Early Music»], se presenta ya el Ciclo de miércoles que ocupará las cuatro semanas de febrero en el escenario de la sede madrileña de la Fundación, sita en la calle Castelló. Bajo el título de Disímiles vidas paralelas, este ciclo pretende confrontar, en cada una de las cuatro citas musicales [6, 13, 20 y 27 de febrero], a dos compositores coetáneos que, pese a representar mundos estéticos o ideológicos distintos, comparten rasgos creativos: un sacerdote católico dedicado a la música profana frente a un compositor protestante de música religiosa [Vivaldi vs. Bach]; dos marxistas protegidos por sus maestros y enfrentados más tarde con ellos [Eisler vs. Revueltas]; dos compositores en lados opuestos del telón de acero que desarrollan una gran afinidad personal y estética [Britten vs. Shostakovich]; y dos compositores coetáneos pero con trayectorias vitales diametralmente opuestas [Victoria vs. Gesualdo].
El primero de los conciertos estará protagonizado por Benjamin Alard, uno de los clavecinistas de mayor proyección mundial en la actualidad, quien está llevando a cabo la grabación integral de la música para tecla de Johann Sebastian Bach, para Harmonia Mundi. En su recital al clave, representará las divergencias existentes en un mismo período histórico, como sucede con como Antonio Vivaldi (1678-1741) y Johann Sebastian Bach (1685-1750). Vivaldi reúne los tópicos del estilo italiano: sacerdote católico de carácter vitalista, triunfó como violinista y como compositor operístico. Por su parte, Bach sintetiza los rasgos del estilo alemán: piadoso luterano, estuvo vinculado a instituciones religiosas, destacó como organista y plasmó sus conocimientos contrapuntísticos en una amplia producción que no incluye ópera alguna. Pero las conexiones entre ambos son más profundas de lo que parece: si Bach se esforzó por transcribir un buen número de conciertos italianos, Vivaldi mantuvo importantes contactos con el mundo germánico. Interpretará obras para clave de Bach, así como transcripciones del mismo sobre obras previas de Il prete rosso.
El conjunto de cámara Oxalys será el encargado de poner en liza el segundo de los conciertos. Pese a la indudable calidad de sus producciones artísticas, ni Hanns Eisler (1898-1962) ni Silvestre Revueltas (1899-1940) figuran entre los compositores más conocidos del siglo XX. Procedentes de dos países geográficamente alejados, ambos mostraron un profundo compromiso con el marxismo. Los dos iniciaron sus respectivas trayectorias vinculados a los referentes del modernismo musical en sus países (Arnold Schönberg y Carlos Chávez) con los que más tarde mantendrían sonoros desencuentros. Además, en distintos momentos de su vida residieron en los Estados Unidos y compusieron un notable corpus de músicas cinematográficas.
Dmitri Shostakovich (1906-1975) y Benjamin Britten (1913-1976) fueron los compositores más reconocidos en sus respectivos países en el periodo de la posguerra. Ello que no impidió que fueran observados con recelo por sus orientaciones políticas [Shostakovich] o sexuales [Britten]. Pese a todo, desarrollaron una admiración mutua y una cercanía personal que les permitió pasar por alto las dificultades que imponía un periodo tan tenso como el de la Guerra Fría. Sus contactos serían facilitados a partir de los años sesenta gracias a la pareja formada por la soprano Galina Vishnévskaya y el violonchelista Mstislav Rostropóvich, dedicatarios de algunas de las mejores obras compuestas por estos dos creadores. Julia Sitkovetsky [soprano], Roger Vignoles [piano] y Fernando Arias [violonchelo] serán los encargados de mostrar este mundo sonoro tan distinte, pero con sutilezas con les acercan.
El conjunto vocal británico Contrapunctus, fundado y dirigido por Owen Rees, pondrá sobre el escenario la música de dos figuas tan extremas en lo vital como geniales en lo musical: Tomás Luis de Victoria (c. 1548-1611) y Carlo Gesualdo (1566-1613), quienes vivieron en el mismo momento histórico, aunque desarrollaron líneas vitales casi opuestas. Victoria, formado en una institución eclesiástica, triunfó profesionalmente en Italia y pasó sus últimos años ocupando un cómodo puesto en Madrid. En Gesualdo se mezclan el ideal del príncipe renacentista protector de las artes con el suplicio del asesino atormentado por sus pecados. Como en un juego de espejos, sus composiciones reflejan dos maneras disímiles de transición desde el Renacimiento hasta el Barroco: equilibrada, clásica y beatífica en el caso de Victoria; violenta, expresiva y manierista en el de Gesualdo.
Como es habitual, el ciclo estará precedido de una serie de breves entrevistas relacionadas con el ciclo, que serán emitidas por Radio Clásica y presentadas, en este caso, por Luis Gago. Los conceirtos son de entrada libre hasta completar aforo, y podrán seguirse por streaming a través de Canal March y YouTube Live, así como por Radio Clásica.
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