Madrid Estudio Coral presentará el sábado 27 de octubre su último proyecto, un concierto dedicado a la música barroca centroeuropea desde la figura de Bach, como Herencia y legado de una manera de concebir la música que enraiza en autores como Buxtehude, Schütz, Schein o Telemann. El concierto contará con la participación del organista Álvaro Carretero, que interpretará desde un órgano de reciente construcción en el taller de Federico Acitores en Palencia. El concierto, tercero de la temporada de El canto de Polifemo, tendrá lugar a las 19:00 en su habitual sede de la céntrica Iglesia de las Mercedarias de Góngora.
«Intentamos aproximarnos a Bach desde la humildad con la intención de ofrecer una versión en la que las palabras, los colores del idioma y su significado, además de la música, perfecta, lleven al público comprender mejor tanto al propio compositor como el contexto de su música», dice Daniel De la Puente, director de Madrid Estudio Coral.
El viaje que propone el grupo culmina con el motete Jesu, meine Freude, BWV 227. En una constante búsqueda de los resortes que mueven los afectos de los oyentes, los músicos que precedieron a Bach utilizaron todos los recursos conocidos para crear una música que se acercaba cada vez más a las palabras y a los sentimientos. Bach, un compositor de modelos relativamente tradicionales, sublimó la herencia sonora de sus predecesores y dejó un legado difícilmente superable.
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