Ayer tuvo lugar, en el salón de actos del Auditorio Nacional de Música de Madrid, la presentación de la 72.ª edición del Festival Internacional de Música Primavera de Praga, uno de los más prestigiosos del panormama europeo y mundial, que este año, al igual que el pasado –y como se anuncia para el futuro–, contará con una notable presencia de artistas españoles en su programación. La presentación en la capital madrileña tuvo una razón de ser especial, la cual fue desvelada en la voz de Antonio Moral, director del Centro Nacional de Difusión Musical, quien anunció futuras colaboraciones del CNDM dentro del marco del festival praguense, comenzando en la edición de 2018 con la presencia de un ciclo, llevado a cabo siguiendo las directrices del Primavera de Praga, específicamente dedicado a la música española, desde la Edad media hasta la producción contemporánea. Para ir abriendo boca, y con la intención de subrayar su admiración e ir saldando nuestra deuda para con la música iberoamericana, Roman Bělor, director del histórico festival, anunció ayer el contenido y los artistas representantes en el pequeño ciclo Acento español, un exitoso ciclo creado en 2016, que contará este año con la presencia de Rocío Márquez y su Lorca, Universo Zapico, EntreQuatre Guitar Quartet y Forma Antiqva. Gracias a la colaboración de Acción Cultural Española (AC/E), que ha subvencionado la pasada y la actual edición, se han presentado con gran éxito proyectos como Tesoros españoles en América, por Al Ayre Español; un recital del pianista Javier Perianes y el espectáculo de flamenco Noches españolas.
El festival internacional de música Primavera de Praga fue fundado en la primavera del año 1946. En sus más de 70 años de historia se ha consolidado como uno de los festivales de música clásica más respetados en el mundo. En la génesis de la Primavera de Praga participó Rafael Kubelík, gran director de orquesta checo y director artístico de la Orquesta filarmónica checa. En las ediciones del festival de los años 1946 y 1947 tuvo lugar el debut internacional del por entonces director novel de orquesta –y más tarde renombrado– Leonard Bernstein, cuya participación en la Primavera de Praga de 1990 puede considerarse, de forma simbólica, su última actuación en Europa. Desde el año 1947 se ha establecido, como parte indivisible del festival, el Concurso internacional de música Primavera de Praga que, desde el año 1957, forma parte de la Federación mundial de los concursos internacionales de música, siendo uno de sus miembros fundadores desde la citada fecha. La Primavera de Praga se ha consolidado como un espacio de encuentro habitual para la música clásica checa, así como para sus intérpretes, con artistas y producciones de otros países. Asimismo, gracias al desarrollo de ciclos especiales, el público checo tiene la oportunidad de conocer la música de otras áreas geográficas, como por ejemplo la música española e iberoamericana, de especial interés en las últimas ediciones del festival.
El programa de la 72.ª edición del festival internacional de música Primavera de Praga contará con una oferta amplia y variada que espera agradar tanto a los amantes del gran sonido orquestal, como a los aficionados a la música de cámara, la música contemporánea o al público que sigue con especial interés las nuevas tendencias de la interpretación histórica de las composiciones de épocas pasadas. El concierto inaugural estará protagonizado por la Filarmónica de Viena, con el director Daniel Barenboim al frente. Esta agrupación visita la Primavera de Praga por séptima vez, aunque en esta ocasión será la primera con el honor de iniciar el festival. Daniel Barenboim se ha tomado los preparativos del concierto de inauguración de forma realmente minuciosa y grandiosa para interpretar Má vlast, de Bedřich Smetana. El concierto de clausura del festival cumple también todos los requisitos de un acontecimiento extraordinario. Así, finalizará con la actuación de uno de los compositores más famosos de la segunda mitad del siglo XX, Krzysztof Penderecki, que dirigirá la Orquesta sinfónica de la Radio checa para interpretar su sinfonía Las siete puertas de Jerusalén, escrita para la celebración de los 3.000 años de la fundación de la ciudad de Jerusalén.
Por lo demás, una extensa programación de cuarenta y cinco conciertos, en los que tendrán cabidas desde grandes solistas internacionales, como Diana Damrau, Maxim Vengerov, Jan Lisiecki, Vilde Frang, Nicolas Altstaedt o el pianista Alexander Lonquich, artista residente invitado del festival; así como la habitual presencia de orquestas checas: Orquesta filarmónica checa, con los directores Kristjan Järvi y Jiří Bělohlávek, la Orquesta sinfónica de Praga FOK, con Lukasz Borowicz y Jonathon Heyward al frente, la Orquesta filarmónica de Brno y Dennis Russell Davies para finalizar; pero también la presencia de grandes orquestas extranjeras: Toronto Symphony Orchestra con su director principal Peter Oundjian, o la Orchestre de Paris junto al director alemán Thomas Hengelbrock. En la edición de 2017 el festival continúa el proyecto denominado Un fin de semana con música de cámara, esta vez con el subtítulo unificador Prejuicios, obstáculos, persecución, en el que se interpretarán obras de compositores perseguidos –Dmitri Shostakovich y otros–, de mujeres compositoras que han luchado contra los prejuicios establecidos sobre el derecho de las mujeres a participar en la creación artística –Mel Bonis o Ethel Smyth– y obras de autores que han elegido la emigración como vía escape hacia una libertad artística y creadora –Sergei Rachmaninov, Karel Janovický, Oskar Moravec, Tomáš Svoboda...– La presencia de los repertorios pretéritos también cobrará importancia en la presente edición, de la mano del conjunto checo Ensemble Inégal y su director Adam Viktora, quienes interpretarán el oratorio de Jan Dismas Zelenka, Gesù al Calvario ZWV 62, en un programa de recuperación del patrimonio bohemio. También se celebrará la efeméride monteverdiana, en un programa de madrigales protagonizado por el conjunto italiano La Compagnia del Madrigale; así como la presencia de William Christie, que regresa al festival tras veintidós años de ausencia, para dirigir a The Orchestra of the Age of Enlightenment, con un programa sobre Bach y sus contemporáneos franceses.
Estrenos mundiales, música electroacústica y una nueva edición del Concurso internacional de música Primavera de Praga, centrado este año en el clave y el violín, completarán un oferta poderosa y llamativa, que ha contado con un presupuesto de entre cuatro y cinco millones de euros.
Fotografía: festival.cz
Compartir