Por Jordi Vidal Reynés
Baltasar Samper. Música de jazz. Conferències de 1935. Edición de Atoni Pizà y Francesc Vicens. Lleonard Muntaner, Palma, 2019. Llibres de la Nostra Terra, 118.
Cuando uno es pequeño admira los aristogatos pero no sabe lo que es el jazz, y se lo pregunta a su hermano mayor mientras mira un programa en blanco y negro. Es una melodía improvisada, te cuenta, es una música americana. Luego uno cursa el bachillerato y en su libro de Historia de la Música el jazz ocupa una línea, junto al pop y el rock. Después de capítulos dedicados al gregoriano, a Palestrina, a Bach, a tantos otros, llega el siglo XX y el jazz ocupa una sola frase. En cambio vas a la universidad y te pones a escuchar esa música que no sabes por donde cogerla, pero que quedas bien ante los amigos si te aficionas a ella o compras algunos discos y te paseas con ellos bajo el brazo.
Me hubiera ido muy bien entonces asistir a las conferencias que el músico mallorquín Baltasar Samper –por cierto, amigo de mi abuelo materno- pronunció en 1935 ante unos atónitos ojos, por no decir oídos poco acostumbrados a la falta de cuerdas y a las rígidas partituras de las obras sinfónicas; gente poco dada a canciones en vez de arias y coros, al saxofón y a la batería. Sus inquietos pies marcando el compás les traiciona. Han sucumbido frente a Duke Ellington o ante la trompeta de Louis Armstrong.
Así pues, ha sido una gran idea editar este libro que recoge las sabias lecciones que sobre jazz impartió Baltasar Samper en Barcelona, en mayo y diciembre de 1935. Los responsables de esta recopilación son los musicólogos mallorquines Antoni Pizá y Francesc Vicens, el primero docente en Nueva York y director de la Fundation for Iberian Music, el segundo es profesor en el Centro de Enseñanza Superior Alberta Giménez de Palma. El papel de Joan Moll ha sido fundamental a la hora de recopilar toda la documentación expuesta en esta ocasión.
Baltasar Samper, exponente del nacionalismo musical catalán, pianista, folklorista y compositor (Palma, 1888-Ciudad de México en 1966). Fue alumno de Granados y Pedrell, alumno de la Academia Marshall, recopiló canciones populares y danzas mallorquinas, compuso música de cine, operetas, música coral y sinfónica, fue admirador de Bartók y Kódaly; trabajó para Rafael Patxot en su recopilación del cancionero popular de Cataluña. Por supuesto destacó también como crítico musical en prensa escrita y como orador. En junio de 1936 firmó, junto a un grupo de intelectuales mallorquines un manifiesto de unidad de sangre, lengua y cultura con los catalanes. Tras la guerra civil partió a Francia y en 1942 pasó a residir definitivamente a México.
Del contenido del libro, tras una introducción de los editores, se da paso a las dos conferencias que Samper dictó en catalán para el Ateneu Polytechnicum de Barcelona y otra para la asociación Discòfils, charlas con ejemplos musicales de los grandes del jazz. Completan el volumen una reseña en castellano de una de las primeras conferencias y otra sobre Ravel, unas ilustraciones y la bibliografía pertinente. Hasta existe un canal de youtube para seguir las pertinentes audiciones.
Samper, un hombre curioso, define el jazz, lo describe, nos habla de sus técnicas, de los instrumentos más utilizados como base rítmica o como solistas, de músicos que no leen música, del compás binario obligatorio, de la estructura de las estrofas sobre las que se improvisa (AABA), de la armonía, del blues, del piano sin pedal, del swing; también repasa su historia, desde los orígenes africanos pasando por la esclavitud y los espirituales negros de clara influencia luterana; también de su impacto en músicos como Stravinsky, Gershwin y Copland. Destaquemos también los paralelismos con los glosadores isleños, las canciones de trabajo campestre y la cadencia de los conciertos para piano o violín, todo bajo un prisma didáctico sobresaliente. La improvisación o jazz hot evita la monotonía, decía el maestro. Para todo ello se empapó de la sabiduría de Hugues Panassié, crítico pionero e historiador del jazz, una música que atrajo entonces a las élites intelectuales de Europa.
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