Libro: «El libro de la música clásica» [AKAL]

Síntesis, competencia y diseño

Por Albert Ferrer Flamarich
El libro de la música clásica. Editorial Akal, Madrid, 2019. 352 págs.. ISBN: 978-84-460-4770-4.

   Akal suele encontrar formatos acertadísimos tanto en el contenido como en el diseño en su colección de música. Y lo ha demostrado nuevamente con otra guía para melómanos y libro de texto para estudiantes entorno a la historia de la música. A partir de la colaboración de distintos especialistas de ámbito angloparlante, se elabora un manual básico que comenta los ejes principales de la evolución musical, con capítulos sobre los grandes creadores y su aportación. Además la elaboración conceptual incluye desde las diferencias entre ópera y oratorio hasta la estructura de una fuga, pasando por la importancia de distintos mecenas y las obras específicas comentadas con cierto detalle.

   Al margen de una historicidad estándar desde el Medievo, hay capítulos bien constituidos como el de la música contemporánea y otros aciertos, como la inclusión de McDowell y de compositoras entre las que se hallan Hildegard von Bingen, Ethel Smyth, y las consagradas Kaija Saariaho y Jennifer Higdon. Se trata de un claro reflejo de la lenta e irreversible inclusión de algunas de las grandes compositoras en un canon historiográfico que, siguiendo el reflejo del libro, se perfila con un relato histórico sensiblemente más receptivo a perspectivas sociales y comentarios musicales que van más allá de lo elemental en cuanto a su forma. El lenguaje y el discurso poseen rigor, sin caer en la banalidad de ciertas melopeas de la moderna divulgación. Por otro lado, sorprende la rareza de encabezar el apartado sobre Richard Strauss (pág. 192) con la exposición de una de las recurrentemente citadas frases de Mahler «una sinfonía debe ser como el mundo, debe abarcarlo todo». Los apéndices presentan un glosario terminológico y otro biográfico ultrasintético de compositores y alguna compositora como Strozzi, Lutyens o Weir.

   La edición aprovecha muy bien el espacio en sus subapartados para condensar informaciones paralelas, específicas y otras digresiones de corte histórico, biográfico y terminológico. Como caracteriza al sello madrileño, el diseño gráfico es acertadísimo, muy atractivo, elaborado e integra abundantes ilustraciones, imágenes, esquemas y cuadros sinópticos que encajan la síntesis de contenidos en una edición de alta calidad: cubiertas duras, papel satinado con pliegues cosidos y combinación de distintos tamaños de letra. En esta vertiente física del libro, la editorial apenas tiene parangón en la bibliografía musical española. Algo que refuerza la necesaria riqueza y accesibilidad de este tipo de manuales, cuyo reduccionismo y esencialidad no merma su valía y utilidad. Precisamente ésta es su finalidad.