Emilio Casares, ayer, en el edificio histórico de la Universidad de Oviedo
Emilio Casares es nombrado socio de honor de ALDEEU en el edificio histórico de la Universidad de Oviedo, en el contexto de una mesa redonda que ayer rindió homenaje a su figura y a la de Gustavo Bueno y Emilio Alarcos
Emilio Casares, ayer, en el edificio histórico de la Universidad de Oviedo
La Universidad de Oviedo acogió ayer una mesa redonda en la que se rindió homenaje a tres pilares de la universidad española: el filósofo materialista Gustavo Bueno, el padre de la moderna musicología española, Emilio Casares y el lingüista Emilio Alarcos. En la cita estuvo presente Gustavo Bueno Sánchez, hijo de Gustavo Bueno; la catedrática de musicología María Encina Cortizo, que leyó un texto en nombre de Miguel Alarcos, hijo de Emilio Alarcos; y el catedrático de musicología Ramón Sobrino, que realizó una emotiva y rigurosa semblanza de Emilio Casares. En el transcurso del evento, en el que Emilio Casares fue nombrado socio de honor de ALDEEU (Asociación de Licenciados y Doctores Españoles en Estados Unidos), el profesor Casares recordó un momento entrañable de su relación con Gustavo Bueno. «Un día me encontró en la universidad y se dirigió a mí en los siguientes términos, con la seriedad que le caracterizaba: "Casares, pero que hace usted aquí". Soy profesor, le respondí, y se marchó. Otro día nos volvimos a encontrar, y cuando me ve, se me acerca y me dice: Casares, no se olvide nunca de que usted y yo somos los profesores más importantes de esta universidad. Yo, por la Filosofía, y usted porque, como decía Beethoven, enseña "la más alta filosofía" y, además, ¡suena!».
María Encina Cortizo, Emilio Casares y Nuria Blanco Álvarez
Emilio Casares y la directora del 42 Congreso ALDEEU, Nuria Blanco Álvarez
María Encina Cortizo, Gustavo Bueno Sánchez, Aurelio Martínez Seco y Ramón Sobrino
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