Un reportaje de Agustín Achúcarro
'La orquesta en la ópera Carmen es reveladora de las emociones de los personajes, que traduce maravillosamente, al tiempo que muestra sus afectos, está muy bien escrita y es muy plástica. Yo cuento con una muy buena orquesta como es la Sinfónica de Castilla y León, a la que he dirigido bastantes veces, y el Ensemble Matheus, y creo que se ha producido entre ambas formaciones un entusiasmo recíproco'. Así levanta el telón de esta conversación con CODALARIO el director Jean Christophe Spinosi, al que le produce una especial satisfacción el hecho de que, tras interpretar en versión concierto Carmen en el Auditorio de Valladolid, los días 15 y 16 de diciembre, actuarán el próximo día 19 en el Teatro Real de Versalles (en donde se mantendrá casi totalmente el mismo elenco).
Reconoce Spinosi que se encuentra algo cansado, pero no por eso pierde ni un ápice de vitalidad a la hora de explicar y hacerse entender en torno a lo que considera que es y supone una ópera como Carmen. 'Los personajes de Carmen y Don José, claro, se mueven entre la vida y la muerte, y encarnan la pasión, pero para mí hay una gran diferencia: ella previamente al comienzo de la ópera ya ha vivido el amor y su corazón ya está roto, por lo que busca el placer que provoca el amor, mientras que Don José no tiene experiencia y para él todo es nuevo y no comprende que Carmen es de todos, es de la vida'. Susurra cantando la Habanera, mezclando el inglés y el francés, y al concluir reseña que 'cuando Carmen canta algo tan irresistible como l´amour, l´amour… al tiempo que está seduciendo a Don José le dice que no están al mismo nivel y que tienen conceptos diferentes de lo que significa amar, que para ella es vivir'. El director también considera que 'los cromatismos descendentes, todas las armonías y los intervalos parecen explicar que el amor es sufrimiento'. Vuelve a canturrear un pasaje y se refiere a lo que algunos analistas dicen sobre el amor: 'es un arma de destrucción masiva'. Esa es para él la revelación del amor de Carmen.
No escapan a su análisis los otros dos personajes centrales de la ópera: 'Escamillo tiene experiencia y para él Carmen es un trofeo como el toro que mata en la plaza, conseguirla supone una competición con Don José, mientras que Micaela es un poco como Don José pero algo más estúpida porque está convencida de que se va a ir con ella, aunque éste le dé largas e incluso se burle un poco'.
Spinosi ve muy nítidamente que 'la música es muy ejemplarizante y muy clara' y que 'Bizet plantea las cosas de manera muy inteligente, para nada como un tópico españolizante, en lo que se refiere a los sentimientos humanos'. 'Creo que un tema como el de la fuerza de la violencia sobre las mujeres, tan desgraciado, lo trata como un tema intemporal' subraya el director. Su forma de exponer esta ópera, que no quiere que parezca tajante, pues es evidente que existen otras formas de comprenderla, a lo único que aspira es 'a ser consecuente con sus ideas'.
Todo a lo que ha hecho referencia Spinosi necesita de unos cantantes concretos, que estarán encarnados por los siguientes intérpretes: Carmen será Dara Savinova, Don José Migran Agadzhanyan, Micaela estará interpretada por Ekaterina Bakanova y Escamillo por Kostas Smoriginas. En cuanto a las formaciones corales en Valladolid intervendrán el Coro de Voces Blancas de Valladolid, que dirige Clara de los Ojos, y una selección de coros de Castilla y León preparados por Jordi Casas, mientras que en Versalles intervendrá la Maîtrise des Hauts-de-Seine. Para Spinosi la mezzo Dara Savinova representa 'una nueva Carmen, con una voz profunda, que no hace un personaje de olé, olé, sino como a mí me gusta, pues es de las que trasmiten el sufrimiento, el amor y la libertad'. Y en cuanto a Escamillo le pondera recurriendo a una anécdota:'hemos tenido dos cancelaciones pero al final hemos conseguido contar con Kostas Smoriginas, el bajo-barítono que ha grabado e interpretado esta ópera con la Filarmónica de Berlín dirigida por Simon Rattle'.
Como ya se ha mencionado, tras Valladolid irán a la Ópera Real de Versalles por lo que actuarán en muy poco tiempo en dos espacios totalmente diferentes, casi opuestos, algo que no le quita el sueño al director y creador del Ensemble Matheus. 'Las ideas dramatúrgicas serán las mismas en ambos casos, por lo que tan solo variarán ciertos aspectos relativos a los balances, y la motivación conseguirá el resto', subraya.
Antes, como antesala a esta charla, Spinosi, que aunque se ha movido en un espectro musical muy amplio se dio a conocer internacionalmente a través de la música antigua, abre de manera informal una puerta al diálogo en torno a ciertas consideraciones sobre este tema. 'Sí, el Renacimiento y el Barroco tienen mucho que decirnos, pero no sólo con la música, aunque esto introduce una paradoja, pues tenemos que contrastar esa información y nos puede llevar a traicionarla. A veces –prosigue el director– queremos estudiar muchos manuscritos antiguos y estamos más en eso, con lo que ponemos la música en formol, en formol vocal, por lo que es un tema complicado al que se añade el estar interesado en entender y sentir la distancia entre la información y la vida'.
Fotografía: Dominik Odenkirchen.
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