La Tokyo Philharmonic visita Madrid en su gira mundial por su centenario. El concierto, dirigido por Eiji Oue, tendrá lugar el viernes 14 de marzo en el Auditorio Nacional de Música
La Tokyo Philharmonic Orchestra ofrecerá un único concierto en España, de la mano de IBERMÚSICA, el próximo 14 de marzo (Auditorio Nacional de Música de Madrid), dentro de su gira mundial en homenaje a su centenario.
La orquesta, dirigida por Eiji Oue, interpretará un programa que incluye dos obras japonesas, “Bugaku”, de Toshiro Mayuzumi, y “Kobiki-Uta”, de Kiyoshige Koyama, así como “La consagración de la primavera” de Stravinsky.
Fundada en 1911, la Tokyo Philharmonic Orchestra tuvo que retrasar su gira mundial, programada inicialmente para 2011, como consecuencia del terremoto y el tsunami que asoló el país en marzo de ese año. Además de Madrid, la orquesta visitará Nueva York, París, Londres, Singapur y Bangkok. Esta gira supondrá su primera aparición en los Estados Unidos.
La Tokyo Philharmonic Orchestra fue fundada en Nagoya, en 1911, y es la orquesta más antigua y con mayor tradición de Japón. Desde su traslado a Tokio, en 1938, la orquesta ha jugado un papel fundamental en la introducción de la ópera al público japonés. La orquesta se convirtió en una organización independiente, después de la guerra, y cambió su nombre por el actual, Tokyo Philharmonic Orchestra (TPO). A partir de entonces, se ha centrado en realizar conciertos de abono, ópera y ballet, al mismo tiempo que realiza programas regulares a través de la NHK (Japan Broadcasting Corporation).
Actualmente es la orquesta más grande de Japón, con más de 150 miembros estables entre sus filas. Su director titular es Dan Ettinger, y cuenta, además, con Myung-Whun Chung como director honorario laureado, y Tadaaki Otaka y Kazushi Ono como directores laureados.
La Tokyo Philharmonic Orchestra actúa habitualmente en el Suntory Hall y el Orchard Hall de Tokio, así como en la Tokyo Opera City, donde tiene su sede. En 1997 se convirtió, además, en orquesta regular del New National Theatre de Tokio. Ha recibido numerosos premios y reconocimientos, entre ellos, el Ongaku No Tomo Sha Prize (1984), el Agency for Cultural Affairs’ Art Festival Prize (1986) y el Art Festival Grand Prize (1995).
Eiji Oue inició sus estudios de piano a los cuatro años y los de dirección de orquesta a los quince. En 1978 fue invitado por Seiji Ozawa a pasar el verano estudiando en el Tanglewood Music Center, donde conoció a Leonard Bernstein, quien se convirtió en su mentor y colega. Compartió el podio con Bernstein durante tres giras internacionales con conciertos en Milán, Viena, París, Moscú y Berlín, entre otras capitales musicales. En 1990 ayudó a Bernstein en la creación del Pacific Music Festival en Sapporo (Japón), donde actuó como director residente de la orquesta del festival.
Es director honorífico de la Orquesta Filarmónica de Osaka y de la Orquesta Filarmónica de la NDR de Hannover. Anteriormente fue director titular de estas orquestas, así como de la Erie Philharmonic Orchestra, la Minnesota Orchestra y la Orquesta Simfònica de Barcelona i Nacional de Catalunya. Oue ha sido director invitado de las más prestigiosas orquestas norteamericanas, y ha obtenido el Premio Koussevitzky, de Tanglewood, la Medalla de Oro Hans Haring, del Mozarteum de Salzburgo, y el Premio de Música Praetorius, del Estado de Baja Sajonia.
La obra “Bugaku” fue encargado por el New York City Ballet tras su gira por Japón, en 1958, y después de que la compañía Gagaku realizara una gira por los Estados Unidos al año siguiente. En esta última gira, los miembros del New York City Ballet tuvieron la oportunidad de escuchar la música de corte y las danzas tradicionales de la Corte Imperial. El cofundador del New York City Ballet, George Balanchine, pidió a Mayuzumi una composición musical que utilizara instrumentos occidentales, pero que imitaran los instrumentos tradicionales de la Gagaku Orchestra. “Bugaku” fue estrenada en Nueva York en marzo de 1963.
“Kobiki-Uta” (1957), es una de las obras más conocidas del compositor Kiyoshige Koyama, y se basa en una canción popular tradicional (La canción del leñador), originaria de la isla de Kyushu. El tema de apertura representa el canto del leñador mientras está trabajando, e incluso puede escucharse, de fondo, el sonido de la sierra, así como el tañido lejano de una campana del templo. El segundo movimiento, Bon Odori, establece el escenario para una fiesta tradicional de verano, con un ritmo de batería rítmica que acompaña una melodía de flauta brillante. El tercer movimiento, Asa no Uta, presenta una variación sobre el tema de apertura, con la incorporación de un glockenspiel, una celesta y un piano. El último movimiento, Finale, se abre con el sonido de una trompeta y un tambor, que la orquesta completa desarrollando el tema de apertura, antes de que un gong señale el final de la obra.
Fotografía: ©TakashiIijima
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