Por Gonzalo Lahoz.
I love... Zarzuelas. Sony. Obras de Chapí, Barbieri, Bretón, Alonso, Serrano, Chueca, Moreno Torroba, entre otros. Ana María Iriarte, mezzosoprano. Teresa Berganza, mezzosoprano. Montserrat Caballé, soprano. Plácido Domingo, tenor. Ataúlfo Argenta, director, entre otros.
Un nuevo recopilatorio de zarzuela llega ahora a las estanterías gracias a Sony, un conjunto de fragmentos orquestales, romanzas, dúos y escenas muy vistos y escuchados por el melómano de toda la vida, con los que seguramente muchos de ellos incluso comenzaron y con los que seguro empezarán los que están por venir. Los clásicos son los buenos, que por algo son los clásicos y sin duda estos lo son.
La casa discográfica recoge los frutos de algunas de sus viejas glorias, como Montserrat Caballé, aquí en La Rosa del azafrán en una de las páginas que mejor se adecuaban a su línea de canto (por suerte, en esto de la zarzuela la catalana siempre supo por donde pisar), Jaume Aragall en Doña Francisquita, Pilar Lorengar en Las Golondrinas o Alfredo Kraus por partida doble en La Tabernera del Puerto y La Alegría del batallón.
Por descontado Plácido Domingo, estrella reciente de la casa al que hay que sacar el máximo provecho, aparece aquí hasta en cuatro ocasiones. En solitario en Luisa Fernanda, El último romántico y El trust de los Tenorios, y acompañando a Teresa Berganza, por cuya sangre corre pura zarzuela, en La Dolorosa. Ya a solas la madrileña hace lo propio con la romanza de Rosa en Los Claveles.
Antes de este plantel de insignes cantantes, otro grupo de estrellas, en absoluto rutilantes sino únicas e irrepetibles, quizá menos conocidas por el grueso de aficionados pero cimiento, orgullo y alegría de la zarzuela durante muchos años. Tanto que hoy en día este tipo de compilaciones han de seguir acudiendo a ellas si quieren ofrecer de lo bueno, lo mejor.
Ana María Iriarte, auténtica mezzo de raza, brilla con luz propia e inicia el disco con el Dúo de Felipe y Mari Pepa en La Revoltosa junto al inolvidable Manuel Ausensi. Ambos aparecen también, aunque se omita el nombre de la mezzo, en La verbena de La Paloma con el insustituible ¿Dónde vas con mantón de Manila? Según los créditos del folleto del disco, participa aquí Antonio Ángel Ligero que, si la memoria no me falla, fue uno de los fundadores de otro clásico, eso sí muy alejado de la lírica: Jarcha. Entiendo que se refieren al tenor cómico Miguel Ligero, toda una institución del género y un delito grave el error, igual de grave que el despiste con el segundo corte, del que se indica es el Coro de viudas de La corte del faráon, cuando en realidad se ha grabado el conocido Ay Ba! de nuevo en la voz de la Iriarte, quien contaba anécdotas de su grabación a Codalario hará ya un año en una, permítanme, .
Omisión de algunos directores de orquesta mientras que en otras pistas aparecen incluso dos, así como un buen número de cantantes en el preludio de Agua, azucarillos y aguardiente, terminan por convencernos del poco cuidado y atención que se ha puesto en la edición.
No puede sin embargo dejar de darse la bienvenida a este tipo de recopilatorios que harán las delicias de aquellos que quieran comenzar con la zarzuela y de los ya duchos en materia que quieran pasar un buen rato. Solo queda cuidar más el cómo se sirven estos manjares para que a todo el mundo le sea fácil poder disfrutarlos y seguir adentrándose en este maravilloso mundo.
Compartir
Aviso: el comentario no será publicado hasta que no sea validado.