La novela de Bulgakov, Corazon de perro, escrita en 1925 y publicada oficialmente en Rusia en 1987 (el Autor murió en 1940) representa y contiene una satira cáustica. Ya sea hacia el "hombre nuevo", que quiso recrear en su principio el comunismo del naciente Soviet y también acusando con irónica y despiadada crítica los experimentos de la medicina, a los famosos estudios de Pavlov mira por donde sobre el automatismo en el comportamiento de los perros.
Traducir todo ello en opera, en el tercer milenio cuando, sin rodeos ni metáforas, podemos afirmar que la ópera como género ha muerto desde hace tiempo, sustituida por otro teatro mas cercano a la sensibilidad del grande publico, representado muy bien por el Musical, constituye un reto. Así pues hay que reconocer, ante todo, al italiano Cesare Mazzonis el valor y la habilidad de haber realizado el libreto, substancialmente fiel a la idea de Bulgakov, que el compositor Alexander Raskatov ha abrigado con su musica. El estreno en Amsterdam, en 2010, constituyó la novedad y el éxito de la temporada; sucesivamente se llevó a la ENO de Londres, teatro que ha cooproducido el espectaculo, donde debutó en inglés. Ahora llega a la Scala en ruso.
Lo que no deja de ser un hecho dificilmente comprensible -o, al contrario, muy previsible, al adquirirse el "paquete" ya confeccionado- puesto que el libreto lo escribiò un italiano en italiano y fue adaptado al ruso, luego traducido al inglés. Para que se diga que las óperas hay que cantarlas en la lengua "original" para no sacrificar la idiomaticidad de la palabra cantada. En realidad es como si los autores, los teatros, rechazaran a priori toda posibilidad de comunicar con el público. Se dirá que este puede leer los sobretítulos -en la Scala vienen en el respaldo de la butaca- pero no es lo mismo, tratándose de obra moderna, entender sin traducciones lo que pasa en el escenario, sin tener que pasar buena parte del tiempo cabizbajos perdiendo detalles de la escena.
Compartir
Aviso: el comentario no será publicado hasta que no sea validado.