La Voz de Asturias (7/11/09)
"KRAUS BUSCABA LA PERFECCIÓN DE LO BELLO"
La soprano madrileña Milagros Poblador participa esta noche en el VII Concierto Homenaje Alfredo Kraus que, con motivo del décimo aniversario de la muerte del gran tenor canario, organiza la Asociación Lírica Asturiana "Alfredo Kraus". El concierto, cuya taquilla estará destinada íntegramente a la Cocina Económica de Oviedo, dará comienzo a las 20: 00 horas en el Auditorio de Oviedo.
- Hábleme de su relación con Alfredo Kraus
- En sus clases me repetía con frecuencia una de sus grandes frases: "La emoción es un momento de la inteligencia". Siempre me identifiqué mucho con Kraus porque, al igual que él, yo tampoco tengo uno de esos instrumentos extraordinarios, al estilo de cantantes como Mirella Freni, que poseía una voz tan atractiva que ya de por sí le dejaba a uno asombrado. Nuestro fuerte como artistas tiene que ver más con la técnica. Con él también aprendí a darle importancia a los ensayos, con la finalidad de tenerlo todo lo más atado posible durante la función.
- Ernesto Palacio ha dicho que llegado el momento Kraus dejó de cantar bello para cantar técnicamente impecable
- Puede ser, pero yo no creo que haya sido una decisión consciente, sino que, con toda seguridad, se debió más a su necesidad de compensar el natural paso del tiempo que acompaña a cualquier cantante. Kraus buscaba, con la técnica, cantar lo más bello posible; de alguna manera intentaba paliar, con la técnica, lo que no tenía de manera natural. Buscaba la perfección de lo bello.
- También ha estudiado con Francisco Lázaro, otro de los grandes tenores españoles
- Lázaro me ofreció la oportunidad de aprender de alguien que me ponía ejemplos en directo y en persona. Es un artista que sabe cómo se hacen bien y mal las cosas, por su gran experiencia. Con él trabajé muchísimo más intensamente que con Kraus, con quien pude estudiar durante un corto período de tiempo, no más allá de quince clases. De Alfredo Kraus aprendí todo lo que tiene que ver con resolver el tema del agudo, que él me explicaba muy claramente, con las palabras apropiadas. Fue muy importante, porque en el canto, muchas veces el estudiante piensa que entiende las cosas y en realidad no es así, dado que las explicaciones abordan conceptos que obligatoriamente son abstractos. También sucede que el que se equivoca a veces es el maestro.
- Hay grandes cantantes que no saben enseñar bien
- Los que han llegado a serlo trabajando la técnica sí, pero los que lo han sido de manera innata es difícil que sepan ver y explicar, con claridad, la cuestión técnica. En este aspecto Francisco Lázaro me enseñó cómo mantener la voz, cómo montarla y abordar la coloratura desde el centro hasta el agudo. Cómo afrontar el agudo y el sobreagudo lo aprendí de Kraus.
- Hay tantos profesores y cantantes perdidos ante estas preguntas. ¿Cuál era la respuesta de Kraus?
- Se lo intentaré explicar como se lo explico a mis alumnos. Tal y como están escritas las notas en un pentagrama, parece lógico pensar que cuanto más arriba estén del pentagrama más hay que subir para lograr hacerlas, y a la inversa. Esta imagen en realidad es equívoca, porque en realidad en nuestro instrumento vocal todo está muy cerca, nada se mueve tanto, hacia arriba o hacia abajo; luego pensar que hay que subir algo de nuestro cuerpo, sea lo que sea, para hacer las notas agudas, es una idea equivocada. Hay que ir en contra de esta inercia que parece lógica pero que, en el canto, es contraproducente. En realidad, abordar con seguridad el registro agudo y sobreagudo es más una cuestión mental. La reacción del cuerpo cuando se intenta hacer un sonido agudo es la de subir, cuando en realidad, el lugar donde uno tiene que poner esa nota sobreaguda es el mismo que en el centro. Esta es una de las cosas que tengo seguras dentro del canto, y que podría discutirle a cualquiera. Todo tiene que estar en el mismo sitio, ni más alto ni más bajo. Dese usted cuenta de que, aunque quisiera subir de alguna manera la garganta o, por así decir, la laringe, es algo que por muchas órdenes que queramos dar al cerebro no podremos conseguir. La garganta está y debe estar siempre en el mismo sitio. Todo está en una zona horizontal y los registros hay que solucionarlos con una mera cuestión de presión de aire. He ahí la cuestión fundamental: ¡todo es cuestión de presión de aire!, que se realiza con el diafragma, y no subiendo barbillas o cualquier otra parte del cuerpo que, de forma natural, entiende que debe subir cuando de hacer un sonido sobreagudo se trata. Si vas al sobreagudo pensando en subir, lo harás mal, lo que hay que hacer es seguir con la misma altura, manteniendo la cabeza, cuello y cuerpo en general. Cuanto más estable es la posición, mejor. Todas las notas, desde el sol hasta el do, en realidad están a la misma altura que para hacer un mi o un fa. El proceso es totalmente intelectual.
- Uno de sus roles estrella es el de la Reina de la noche de "La flauta mágica"
- Lo he cantado más de cien veces desde mi debut en la Staatsoper de Berlín. Es un rol en el que siempre se hacen muchas sustituciones.
- ¿Cómo clasificaría su voz?
- Me da mucha rabia que se clasifiquen las voces de los cantantes. Simplemente hay papeles que te van y otros que no. Personalmente me fijo en la trayectoria de cantantes con las que me identifico, para saber por dónde evolucionar.
- Actualmente existe una tendencia en la dirección de quitar notas que el compositor nunca puso pero que la tradición hizo costumbre
- En mi opinión hay que saber con lo que se cuenta. Si un director tiene una cantante con un registro sobreagudo precioso, debería sacarle partido y olvidar toda cuestión purista. Por otro lado, si haces un "Don Pascuale" y la soprano no tiene agudos, evidentemente es mejor optar por seguir la partitura al pie de la letra. Pero si los hace bien, entonces conviene acelerar los "tempi" y ayudar al cantante para su lucimiento. Espero con ansia que vuelva la época de los grandes directores de orquesta, los que sabían acompañar de verdad a un cantante.
- Hablemos de las sopranos que, además de cantar, cuidan mucho su estética
- Dentro del mundo del canto hay espacio para todas. Lo que sería intolerable es que se eligiera a una cantante que no tuviera la voz adecuada, sólo porque es agradable físicamente. Cuando la voz es inadecuada, ya puede ser la Venus de Milo en persona. En el mundo de las sopranos hay tanta oferta que se dan muchas posibilidades. De cualquier manera, hoy en día una cantante como Montserrat Caballé lo tendría difícil para hacer carrera, porque en todos los grandes papeles hay cantantes delgadas y atractivas que podrían hacerlos.
Compartir
Aviso: el comentario no será publicado hasta que no sea validado.